Por: Lina María Peña
En medio de la tormenta eléctrica que se presentó en el clásico de la costa entre el Unión y el Junior de Barranquilla, los jugadores de ambos equipos vivieron su propia odisea en los vestidores en toda la parte interna del inconcluso Sierra Nevada.
En la transmisión en vivo que realizaba el canal Win Sports, el médico de la institución bananera manifestó contundentemente que es lamentable que un estadio que apenas tiene dos años de haberse construido tenga unas condiciones tan deplorables y aún no ha sido entregado.
Según Edgar Sánchez Comas, los vestidores y los sitios donde se realizaban las entrevistas estaban totalmente inundados y con esas condiciones el estadio es invivible.
Las imágenes son totalmente dicientes y mientras el Alcalde Rafael Martínez se vanagloria de un hermoso estadio, los samarios y los Magdalenenses tienen que soportar la vergüenza nacional cuándo se muestra una obra costosa con éstas precarias condiciones, que además pone en riesgo a los mismos asistentes y deportistas al quedar atrapados en esta infraestructura que aún no ha sido terminada y que ya presenta deterioros.
El propio René Whedekin de la cadena Win Sports le contó al elartículo.co, que la zona de transmisión interna es absolutamente inusual y lamentable sobre porque el agua la tenían prácticamente a los tobillos.
Finalmente, el tecnico Carlos Silva dijo a los micrófonos de Win sports que el estadio está tres metros por debajo del nivel del mar y eso provocó la inundación y ha su vez afirmó que los vestidores tenian el agua sobre las rodillas de los jugadores.
