Por: Tata Sánchez Oviedo
La gobernadora de los magdalenenses, siempre comprometida con todas las poblaciones indígenas que habitan en este sector del país, se ha puesto como meta que, durante su administración, hacer posible alcanzar junto con la ministra de Cultura, Carmen Vázquez Camacho, que esta población de la Sierra Nevada de Santa Marta sean añadidos por la Unesco a la lista de Patrimonio de la Humanidad.
Este trabajo, que conlleva una importante y ardua gestión, tiene una duración de al menos dos años antes de que pueda hacerse realidad. Así lo indicó la ministra de cultura quien debe tomar la vocería entre los líderes políticos y espirituales de los cuatro pueblos ancestrales y los líderes de las administraciones territoriales, para lograr que dicho proyecto sea un hecho.
Esto entre otras cosas implicaría para los pueblos Arhuaco, Kankuamo, Kogui y Wiwa, un reconocimiento a nivel mundial, y un enriquecimiento no solo simbólico sino también material para la Nación, en términos de ingresos de regalías.
Hace un par de meses, en una sesión ordinaria de la Comisión Interseccional de Patrimonio Mundial (CIMP) se presentó la propuesta enviada por el Cabildo Arhuaco Gobernador de la Sierra Nevada, Rogelio Mejía. El oficio solicita añadir el sistema de conocimiento ancestral de los pueblos Arhuaco, Kankuamo, Kogui y Wiwa de la Sierra Nevada de Santa Marta a la lista de Patrimonio Mundial y a la lista representativa de Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad de la UNESCO.
La respuesta a la solicitud enviada a la Presidencia de la República ratifica que el mencionado proceso se adelantará con apoyo de la Dirección de Patrimonio del Ministerio de Cultura, que trabajará de manera articulada con Parques Nacionales y el Ministerio de Relaciones Exteriores para dar apoyo a los pueblos de la Sierra Nevada y a la administración de la gobernadora, Rosa Cotes de Zúñiga.
