Por: Vanessa Milena Bermúdez-@VanessaMilenaB3
El “tatequieto”
Los considerandos del Decreto 570 del 1 de abril de 2019, por medio del cual el Presidente de la República designó alcalde encargado del distrito de Santa Marta, contienen la respuesta del Alto Gobierno a la “estrategia jurídica” que se gestó desde la Alcaldía del Cambio, para asegurar el control del distrito.
La jugada jurídica fue así: Sabiendo Rafael Martínez que pesaba una Medida de Aseguramiento Domiciliaria en su contra, justo se autoconcedió vacaciones un día antes de la audiencia en la que con, toda seguridad sería confirmada la medida, para generar su vacancia temporal POR VACACIONES, antes de que se generase POR LA MEDIDA DOMICILIARIA.
Con ello, tanto Martínez como su Jurídico asumieron que se le adelantarían al Presidente haciendo el encargo de Torné por todo el período de las vacaciones y que ello dejaría a Duque sin la posibilidad de designar a su propio encargado, mientras estudiaba la terna de Fuerza Ciudadana; que dicho sea de paso, se apresuraron a mandar a través del senador sombrilla, Antonio Sanguino con toda prontitud.
Duque no cede a presiones
Los cálculos jurídicos de lo que Adolfo Torné llamó en dos ruedas de prensa como alcalde encargado, la “situación administrativa”, no consideraron que el Derecho no es una ciencia exacta y que, para interpretaciones y aplicación de normas, la Presidencia de la República cuenta con juristas de alto calibre.
En efecto, toda la parte considerativa del Decreto Presidencial puede entenderse como un claro mensaje de parte de Duque a la “fuerza” que ha ostentado el poder en Santa Marta en los últimos siete años.
En un solo párrafo Iván Duque, a través de su Ministra del Interior le dijo a Torné, a Rafael Martínez y en últimas al líder de Fuerza Ciudadana, Carlos Caicedo, que como Presidente tiene la potestad de designar a un funcionario de su confianza para que asuma las riendas del gobierno de Santa Marta, mientras estudia a los de confianza de aquellos, para escoger a uno que continúe con la ruta programática contenida en el Plan de Desarrollo del Distrito.
“…el Gobierno Nacional considera que el acto administrativo expedido por el alcalde titular, designando su reemplazo por vacaciones, no afecta la competencia constitucional y legal que le asiste…para adoptar las medidas tendientes a llenar la vacancia”
¿Conclusión? Duque desestimó los argumentos que Torné expuso en la carta que le dirigió e incluso ignoró la presión mediática que se le quiso hacer con las declaraciones en ruedas de prensa, trinos, hashtags y hasta carta firmada por un grupo de concejales, que bien pareció una copia al carbón del escrito de Adolfo Torné.
¿Qué viene ahora?
Andrés Rugeles Pineda, como Alcalde encargado por designación presidencial tiene todas las facultades y poderes que reviste el cargo y puede pedir la renuncia protocolaria de todo el gabinete, incluídos los Gerentes de entidades descentralizadas como el SETP y la ESSMAR o el Director del DADSA, si es que esos funcionarios no se atreven a presentar voluntariamente sus renuncias.
Se espera que en las próximas horas tenga lugar la toma de posesión del nuevo Alcalde y que se dirija formalmente a la opinión pública.
