Redacción: Katia Vásquez
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Los residentes del barrio María Eugenia solicitan a la gerente del SETP y al alcalde Carlos Pinedo que aumenten la frecuencia de los buses en la ruta 39, ya que la falta de transporte los obliga a usar mototaxis, lo que genera preocupación por la seguridad.
Los residentes del barrio María Eugenia, en la ciudad, están alzando su voz para exigir mejoras en el servicio de transporte público, una necesidad que aseguran ha sido ignorada por años. La escasa frecuencia de la ruta 39, la única que cubre la zona, ha generado frustración y malestar en la comunidad, obligando a muchos a optar por alternativas como los mototaxis, un medio de transporte no regulado.
Darío Padilla, líder social del barrio, expone que la falta de buses afecta a todos los sectores de la comunidad, pero especialmente a quienes dependen del transporte público para ir a trabajar o realizar diligencias fuera del barrio. “Después de un largo día de trabajo, tenemos que esperar hasta una hora para que pase la buseta de la ruta 39. Esto obliga a los moradores a del barrio a usar mototaxis, lo cual es más caro y, en algunos casos, peligroso”, comenta Padilla.
El uso de mototaxis, que no cuentan con regulación oficial, ha aumentado en el sector debido a la ineficiencia del servicio de buses. Los vecinos se sienten preocupados por la falta de seguridad y regulación en este medio de transporte. “No es justo que por la falta de frecuencias nos veamos obligados a utilizar un transporte inseguro”, enfatiza Padilla.
En respuesta a esta situación, la comunidad ha hecho un llamado directo a la gerente del Sistema Estratégico de Transporte Público (SETP) y al alcalde Carlos Pinedo, solicitando que tomen acciones urgentes para mejorar la movilidad en el sector. Los habitantes exigen que se aumente la frecuencia de los buses y se amplíen las rutas que cubren la zona.
Además de afectar la movilidad, este problema tiene un impacto directo en la seguridad de los moradores, quienes deben esperar largos periodos en la calle o recurrir a medios de transporte alternativos y no regulados.
La comunidad espera una respuesta pronta y efectiva que permita mejorar su calidad de vida y solucionar de una vez por todas el problema de movilidad en María Eugenia.
