En la instalación del Comité Nacional de Participación para la construcción de la paz, el presidente ejecutivo de la Federación Colombiana de Ganaderos (FEDEGÁN) propuso rescatar la región del Catatumbo, como ejemplo para mostrarle a Colombia que la paz es posible.
En el acto de instalación del Comité Nacional de Participación creado en el marco de las negociaciones de paz entre el Gobierno Nacional y el Ejército de Liberación Nacional, ELN, el presidente ejecutivo de FEDEGÁN y miembro de la comisión gubernamental, José Félix Lafaurie Rivera, lanzó una propuesta que sorprendió y fue bien recibida.
El dirigente gremial inició resaltando la necesidad de devolverle a Colombia la fe perdida en la paz, para luego proponer que la mejor manera de mandarle al país un mensaje de “sí se puede”, es demostrándoselo con resultados.
“Emprendamos un ‘gran piloto’ en una región azotada por el abandono, la pobreza y la violencia del narcotráfico; en el Catatumbo, por ejemplo (…) Concentremos allí la presencia y los recursos del Estado, y en un entorno de cese al fuego, llevemos seguridad, bienes públicos e inversión privada…”. Con una invitación a no seguir aplazando decisiones -¡Hagámoslo ya!, enfatizó-, Lafaurie formuló su propuesta ante los 3000 asistentes, en un acto presidido por el presidente Petro.
El presidente ejecutivo de FEDEGÁN reiteró, además, la voluntad del gremio de cumplir con los compromisos adquiridos con el Gobierno Nacional en el Acuerdo de venta directa de tierras ganaderas para la Reforma Rural Integral, un tema al que se refirió también el primer mandatario, para insistir en una versión mixta de este Acuerdo, que fue presentada por el Ministerio de Agricultura y la Federación Colombiana de Ganaderos (FEDEGÁN) en el pasado Agroexpo.
“Le compramos la mitad de la hacienda; le damos un billete público para que en la mitad que le queda metas más vacas (…) y la otra mitad va para producir maíz, yuca, en manos del campesinado colombiano (…) Ganamos todos; gana el hacendado…, gana el campesino…, y gana el país”. Así explicó el presidente el proyecto con FEDEGÁN, el cual puso como ejemplo de que un Gran Acuerdo Nacional es posible.
Refiriéndose a la participación de la sociedad, tema central del evento, el presidente ejecutivo de FEDEGÁN enfatizó en su importancia como deber ciudadano y derecho fundamental de todos los colombianos, pues “la verdadera paz no se firma ni se negocia, se construye a diario, entre todos, porque es un asunto de todos”.
Por ello, en lo que ha sido una posición inalterable durante su participación en la Mesa de Diálogos, Lafaurie le recortó al ELN la necesidad de comprometerse con el cese de hostilidades a la población civil, “pues solo una sociedad libre de toda dominación podrá participar en la construcción de la paz”.
Igualmente, el dirigente gremial manifestó que coincide plenamente con el Gobierno en dos convicciones: la primera, que la paz pasa por la recuperación del campo, y la segunda, en el potencial de Colombia para convertirse en potencia agroalimentaria y proveedora de alimentos al mundo.
Lafaurie concluyó su intervención con una confesión de su fe en Colombia y en el buen suceso del cese al fuego, para que “una paz posible se asome en el horizonte de la patria”.
