Por Maria Fernanda Peña
Se estima que por lo menos el 90% de la población salió afectada.
Mozambique se vio azotada por un ciclón que traía consigo vientos hasta de 200 km y lluvias intensas, causando una devastación en la costa central de las provincias de Zofala, Zambézia e Inhambane.
Los equipos de rescate han trasladado a refugios a centenares de personas afectadas por este fenómeno, e informan que se están preparando para un posible brote de cólera que consideran inevitable tras la emergencia que se presentó.
El gobierno ha explicado que el número de afectados aumentó de 18.000 a 128.000 desde el pasado domingo, y hasta la fecha lleva al menos 686 víctimas mortales.