Uno de los temas más importantes para analizar de 2020, desde el punto de vista económico y político y que tuvo como protagonista al Congreso de la República, es el relacionado con la reforma al Sistema General de Regalías que buscaba entregar mayores recursos a los entes territoriales productores de hidrocarburos y modificar temas de funcionamiento donde destaca la eliminación de los OCAD de orden municipal y departamental. Paralelamente, a medida que los efectos de la pandemia y el confinamiento fueron creciendo, la aprobación de proyectos por parte del SGR también lo hizo, gracias a la expedición del Decreto 513 y la consolidación del Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación.
Por lo anterior, Daniel Castillo (Economista Investigador) realizó una investigación escrita para Crudo Transparente, donde hace una análisis cuantitativo y cualitativo de los temas mencionados, que permitieron llegar a conclusiones desde el punto de vista del funcionamiento del SGR, su relevancia en el contexto de la Covid-19, y las posibles implicaciones que tendrá durante 2021 la reforma al Sistema General de Regalías.
Las iniciativas y recursos aprobados durante el año anterior, tuvieron una mejor distribución a lo largo del país, sin embargo, Antioquia, Córdoba, Bolívar, Meta, Cesar y Putumayo, siguen siendo los departamentos que mayor cantidad de inversiones y regalías viabilizan. Por su parte, el sector de Ciencia, Tecnología e Innovación, gracias al protagonismo del OCAD Minciencias, logró posicionarse como la industria que mayor cantidad de capital gestionó; los sectores de Salud y Gobierno Territorial, tuvieron gran protagonismo en el marco de la emergencia económica, social y de salubridad.
Los OCAD municipales fueron los encargados de dar vía libre al 61,4 % del total de proyectos aprobados en 2020, en su mayoría a los dirigidos a combatir los efectos de la pandemia y el confinamiento, por medio de mejoras en la infraestructura médica, y ayudas a pequeños empresarios de industrias como la agrícola, por lo que sus características fueron, ser iniciativas de corto plazo y de baja envergadura. Este fenómeno invita a pensar si la decisión de eliminar estos órganos dentro de la reforma al SGR que entra en vigencia en 2021, fue una buena decisión.
En cuanto al nuevo funcionamiento del SGR, los grandes retos que tiene son preservar la autonomía regional, dar mayor participación a la ciudadanía en la toma de decisiones, transparentar los procesos en todos los niveles, llevar recursos suficientes a zonas no productoras y vulnerables y dotar de fortalezas técnicas y de planeación a las instituciones de orden territorial.
