Más de 7.200 hectáreas de tierras han sido devueltas a las víctimas del conflicto armado en Magdalena y Atlántico mediante el trabajo liderado por la Unidad de Restitución de Tierras (URT). Esta labor ha permitido que a más de 600 familias se les reconozcan sus derechos en esta parte del país
En el Magdalena y Atlántico se han recibido 8.206 solicitudes, sobre las cuales se ha determinado la inclusión o no en el Registro de Tierras Despojadas. Esto representa una atención del 82 % de los casos estudiados por la Dirección Territorial.
Hasta la fecha, los jueces han emitido en esta zona del país 116 sentencias de restitución, cuyas órdenes dadas a la URT están siendo cumplidas a través del equipo de proyectos productivos. Este grupo de profesionales trabaja arduamente para garantizar que las víctimas del conflicto favorecidas con los fallos cuenten con la implementación de sus proyectos. La inversión para el apoyo de estas iniciativas alcanza los $ 5.121 millones.
Estos recursos han sido destinados para proyectos de café, ganadería doble propósito, frutas, hortalizas, avicultura y apicultura, los cuales han sido implementados de acuerdo a la vocación del territorio en los que se encuentran los campesinos retornados.
“Agradecemos a la Unidad de Restitución de Tierras por el apoyo que nos ha brindado, hoy no sólo estamos de regreso en nuestra tierra, sino que además tenemos nuestro proyecto de ganado y con ello han venido otras medidas que nos favorecen”, indicó Leyda Marriaga, de la vereda El Encanto, en Chibolo, Magdalena.
A LA ESPERA DE RESPUESTA
Actualmente, para el caso del Magdalena y Atlántico faltan por conocerse las decisiones de los jueces con relación a más de 1.400 solicitudes de restitución que ya fueron presentadas en demandas.
De igual manera, el trabajo para este 2018 desde la URT está enfocado en dejar en manos de los jueces más de 400 nuevas demandas, proceso en el que la entidad avanza de manera diligente.
