Las potencias europeas y China se afanaban el miércoles en salvar un acuerdo histórico sobre el programa nuclear iraní después de que el presidente Donald Trump retirara a Estados Unidos del pacto y volviera a imponer sanciones contra Teherán
Trump desató una ola de críticas al anunciar el martes que su país se retira del pacto destinado a garantizar el carácter no militar del programa nuclear iraní, una medida que amenaza con deshacer años de esfuerzos diplomáticos y agudizar la inestabilidad en Oriente Medio.
“Los riesgos de una confrontación son reales”, advirtió el ministro francés de Relaciones Exteriores, Jean-Yves Le Drian.
Irán reaccionó con cólera a la decisión de Trump. Diputados iraníes quemaron el miércoles una bandera estadounidense de papel y una copia del acuerdo sobre el programa nuclear en la tribuna del parlamento, al grito de “muerte a Estados Unidos”.
En cambio, los rivales regionales de Teherán, Arabia Saudita e Israel, aplaudieron el anuncio de su aliado estadounidense.