Por: Teodoro Cesar Gomez Rodriguez
Recuerdo que al Rector Pablo Vera Salazar le tocó enfrentar a quienes pretendieron hacerse elegir a la brava en el consejo superior en representación de Fuerza Ciudadana, quienes apelaron a todos los recursos non – santos para infiltrarse en los órganos de dirección, sin los méritos requeridos.
Ahora el dueño de Fuerza Ciudadana se quiere aprovechar del momento de reflexión académica de la institución ante la crisis acumulada e histórica de la Universidad Publica en Colombia que comparada con Universidades del Continente Americano poco tienen para forjar el recurso humano de la región con tantas ventajas comparativas.
Institución Universitaria donde el mismo Carlos Caicedo es responsable de sus bajos recursos por subsidio estudiantil comparados con los que recibe la Universidad Nacional que son alrededor de 15.000.000 por estudiante matriculado y no 2.500.000 como le giran a la Universidad del Magdalena, tarea que en otras regiones defienden los Congresistas en las comisiones de presupuesto o en plenarias de Senado y Camara, pero como resultado del escozor premeditado de Caicedo para evitar ser vigilado y cuestionado por Congresistas o miembros del Consejo Superior se distanciaron de la escasa transparencia en el uso de los recursos y de docentes que al denunciar los presuntos actos de corrupcion acabaron en una tumba.
Congresistas que al marginarse en una etapa aciaga de balas cruzadas entre guerrillas y paramilitares dejaron a la deriva el compromiso de la gestión por mejores recursos, esta bancada que inicialmente confío en Caicedo se decepcionó del autoritarismo y descortesía del personaje, tal y como sucede con los gremios económicos que luego de respaldarlo en las elecciones tanto como a su sucesor decidieron hacerse a un lado ante tanta inconsecuencia o disputas innecesarias con otros actores del poder local y regional.
Hoy la Universidad del Magdalena a pesar de los superiores indicadores de normas iso – calidad y oferta académica, amen de la multiplicación de cupos en cada programa, hace gestiones con la Gobernadora Rosa Cotes de Zuñiga y los Congresistas del Magdalena para que se le inyecte del deficitario presupuesto Nacional 89.000.000.000 millones a la del Magdalena en razón del sustento que el actual Rector hace de los meritos del Alma Mater, para luego promover gratuidad a los estratos más bajos e invertir en sedes alternas como en el Sur y Centro del Magdalena.
Sedes que por insistencia de la actual Gobernadora y del anterior Gobernador se guarda la esperanza que Ivan Duque considere la solicitud de inversion urgente en un Departamento rezagado ante la demanda de formación superior, para transformar los indicadores del desarrollo humano y productivo a través de la investigación aplicada con nuevos líderes del conocimiento y del emprendimiento regional, pues se reconoce la importancia de la educación superior, para ello han instituido programas conjuntos que les permite a los más humildes pero con cacumen ingresar al Alma Mater.
Para nadie es un secreto que la conducta irracional e irascible de Caicedo le enfrentó a quienes al principio le habían apoyado en la Universidad como Rector sin ser Abogado titulado, como aquellos Congresistas y Gobernadores que lograron se aprobara inicialmente la estampilla que permitió a las arcas de la Universidad del Magdalena recibir 1.6 billones para su adecuación y ampliación física, laboratorios, salones y bloques administrativos, lago interno, escenarios deportivos y demás dotaciones académicas, con un bemol inexplicable ( les gustan las fachadas..? ) la calidad nunca pudo estar resuelta o atendida con diligencia en la época de Caicedo.
Tarea eficazmente cumplida por los Rectores que lo reemplazaron después de aquella larga y dolorosa instancia que costo vidas de inocentes, investigación no resuelta después de 18 años de pesquisas con 42 Fiscales trasladados y 22 declaraciones del investigado y que aún no se sabe si fue o no el autor intelectual de los asesinatos de Hugo Maduro, Roque Morelli, Julio Otero u otros desaparecidos.
Será que la estrategia es relanzar el movimiento político que en siete años no ha logrado superar los precarios indicadores de desarrollo humano de la ciudad..? y lo que ha provocado son polémicas publicas por el centenar de elefantes blancos, prórrogas, sobre costos, como de investigaciones penales, disciplinarias y fiscales y/o confrontación personal con todo aquel que le exige respeto y cumplimiento de sus responsabilidades político – administrativas..? acaso como una réplica de la historia de la Universidad..? será que ahora faltan las víctimas con disparos en la sien..?
Me pregunto ya con siete años en el poder de FC, con dos o tres aciertos administrativos y con billones mal gastados sin que la ciudad sea un ejemplo de eficacia y eficiencia pública, ni desarrollo humano o productivo destacable como en otras capitales del Caribe, acaso se pretende desconocer que ya pertenecen a los de “antes..”? será que son un grupo de inconsecuentes tanto como aquellos que se equivocaron a exprofeso en el pasado infiltrando en el presente una marcha Universitaria para reeditar un movimiento político como FC desprestigiado en Santa Marta..?
Definitivamente Carlos Caicedo y sus adeptos jamás conocerán ni la decencia, ni la ecuanimidad.. pobre Villa de Santa Marta otro engaño más..
