Por: José Ángel Acosta Cuello
Desde que la liberaron, No ha hecho más que tratar de socavar al estado, insultar y ofender a quienes la salvaron del secuestro y apoyar y defender a quienes la secuestraron. Fue en el 2002, cuando la exitosa “Operación Jaque” le propino un golpe de victoria contundente al grupo terrorista de las FARC. Rescatando a la entonces ex candidata a la presidencia de la republica Ingrid Betancourt y a catorce rehenes más.
Naturalmente Nadie lo podía creer, Cuando las Fuerzas Militares lograron el impecable rescate humano de aquellos quince secuestrados por las Farc, la sociedad colombiana en pleno se sintió testigo de una película de acción y suspenso con un final feliz e ingenioso. pero no todo termina ahí, Íngrid Betancourt, La ex rehén de las FARC demando al estado colombiano y le exige 6.8 millones de dólares por daños y perjuicios ocasionados en los seis años en que estuvo en poder de las FARC, apoyó públicamente a el candidato opositor del gobierno que la libero, y no conforme con eso, se fue a vivir a Francia porque en Colombia no había garantías de seguridad. Cría cuervos y te sacaran lo ojos.
En resumidas cuentas, el estado le salió a deber a Betancourt, no entraré en detalles de la organización, producción, costos y beneficios que ostenta la famosa Operación Jaque, pero solamente volver a la libertad ya es ganancia, Defender los derechos de los colombianos fue y sigue siendo una prioridad. En resumidas cuentas, el estado actuó de buena fe, no reconocer eso es un error. Bien lo decía nuestro libertador, Simón Bolívar: “Más cuesta mantener el equilibrio de la libertad que soportar el peso de la tiranía”
Ingrid, Ojo con el 2023… au revoir.
