A pesar de ser una especie amenazada, la hicotea sigue siendo uno de los platos preferido por muchos en la temporada de Semana Santa.
La Corporación Autónoma Regional del Magdalena -Corpamag- recomienda evitar la caza, venta y el consumo de hicoteas con el fin de detener su extinción.
Además, que las personas que comercializan este animal tendrán penalización, sanciones con cárcel y multas ya que la caza de este animal genera un gran impacto ambiental en los bosques al utilizar la quema para atrapar a esta especie.
La hicotea es una tortuga dulceacuícola, que se encuentra amenazada en Colombia por la caza y el tráfico ilegal, especialmente por ser muy apetecida en el Caribe Colombiano durante la época de cuaresma previa a Semana Santa.
Lastimosamente esta época coincide con las épocas de desove de las tortugas de agua y de tierra, viéndose afectados tanto los adultos como los huevos, impidiendo así que continúe el ciclo reproductivo de esta especie y causando una disminución poblacional, que influye también en el tamaño de las hembras, lo cual afecta directamente tanto en el número de huevos de cada postura, como en el tamaño de los ejemplares en las futuras generaciones.
