Café de la Sierra Nevada tiene encantados a los europeos

Es distribuido por indígenas Kogis, pero en Santa Marta solo se encuentra en la Casa Indígena. Tiene un valor de $10.000 y $20.000. 

Un café samario está siendo exportado a Alemania e Italia. Es el café Kogi, un producto sembrado, recogido y procesado por indígenas de la Sierra Nevada de Santa Marta.

Aunque en Santa Marta solo se puede adquirir en la casa indígena, en otras ciudades del país como Medellín, Cali, Bogotá, Barranquilla y Bucaramanga, está disponible en almacenes de cadena.

La siembra y su recolección están a más de tres mil metros sobre el nivel del mar y de acuerdo a la característica del empaque, el producto es 100% natural y silvestre, debido a que las semillas y la tierra, no reciben fumigación o químicos para forzar a su crecimiento.

Vangelio Sauna, representante Kogi e hijo del cabildo Gobernador José De Los Santos Sauna; asegura que el café está en exportación desde hace cuatro años y que su distribución nació por la necesidad de tener un producto propio y lo más importante, fortaleciendo la economía de dicha etnia.

“Nuestra exportación alcanza las 24 mil toneladas al año. El mercado con el que hemos adelantado conversación y tenemos buenas relaciones es Europa. Específicamente en países como Francia, Italia y Alemania”, manifestó Vangelio.

PROCESAMIENTO

Las semillas de café que se cultiva en la Sierra Nevada de Santa Marta, solo tiene dos cosechas al año. Razón por la que el cuido y trabajo es completamente natural sin ser alterado.

Y ese café de exportación tiene algunas características ventajosas, tal como ser un producto 100% natural y manejado en forma culturalmente apropiada, es decir,  aplicando toda la ley de origen de los pueblos Kogi de la Sierra Nevada de Santa Marta.

Igualmente, el manejo de la parte espiritual que es propia de las culturas indígenas; la conservación de los recursos naturales; utilización de la semilla tradicional sin cambio alguno para seguir cultivando sin afectar el bosque y finalmente, su mayor fuerte, consiste en que, desde la producción hasta la distribución es manejado por los Koguis y la utilidad que se genere es para comprar sitio sagrado y seguir en la conservación de la cultura y tradición.

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