Al Ping Pong jugaron con la vida de una joven, tres clínicas en Santa Marta

Por: Tata Sánchez Oviedo

Los paseos de la muerte parece interesarle poco a los entes competentes para que inicien los cambios en las clínicas de Santa Marta, en donde estas personas, una vez más, juegan a ser ‘doctores’ y acaban con la vida de una joven de 22 años de edad.

Como una pelota de ping pong rebotó Yulianis Harding Cuisman, una joven de 22 años quien en compañía de su madre llegó hasta la clínica Los Nogales, presentando dolores en el omoplato, después de una larga espera es atendida por una doctora quien le entrega una orden para inyectología y le aplican tres medicamentos que más tarde le fueron suspendidos por reacciones negativas que Yulianis estaba presentando (brazos enrojecidos, fuerte dolor de cabeza y dificultad para moverse).

Al hacerle cambio de medicamentos y al presentar leve mejoría, Yulianis junto a Yamile, su madre, toman rumbo a casa pues ya le habrían dado de alta, pero a los días, Yulianis nuevamente presentó los síntomas que sintió en aquel momento en el que le pusieron los tres medicamentos, razón por la que la señora Yamile, decide esta vez llevarla a la clínica del Prado, a ver que diagnóstico podrían arrojar.

Para la sorpresa de ambas, lo que tenía la joven Yulianis era una hemorragia interna en el cerebro pero que lamentablemente no podrían practicarle la cirugía en esas instalaciones sino en la clínica Cehoca, nuevamente Yulianis con todas sus dificultades ante la mirada indolente de todos los ”expertos en salud” y siguiendo con el juego del ping pong llega con su madre a Cehoca en donde la tragedia se agravó.

ONCE DÍAS EN CEHOCA…

Luchando por su vida, superando cada rebote de este juego cruel, jugado por inescrupulosos, la joven de 22 años, necesitando urgentemente una cirugía en el cerebro, es dejada en espera en donde después de 11 días internada, sin ningún tipo de atención y cansada de nadar contra la corriente parte de este mundo terrenal.

La madre por supuesto que no se encuentra conforme con el mal trato que de dieron al delicado estado de salud de su hija y afirma que durante su ausencia desconectaron a su hija y que además una de las enfermeras de esa clínica le habría dicho que de cualquier forma se iba a morir.

La señora Yamile ahora, se encargará de realizar todas las gestiones necesarias para aclarar los hechos que apagaron la vida de la joven Yulianis que deja una niña de 3 años de edad y una madre inconsolable y con ganas de hacer justicia que aprovecha los medios de comunicación para hacer un llamado a los entes pertinentes para que reorganicen la selección del personal que labora en estos centros de salud.

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