El mandatario distrital Carlos Pinedo, calificó de “sapo” al gobernador Rafael Martínez en una polémica respuesta en redes sociales, criticando su gestión y defendiendo su propuesta de incentivos para policías. El intercambio revela la creciente tensión política en la región.
En un episodio reciente en las redes sociales, el alcalde de Santa Marta, Carlos Pinedo Cuello, y el gobernador del Magdalena, Rafael Alejandro Martínez, protagonizaron una acalorada disputa. La controversia surgió a raíz de una propuesta de Pinedo para ofrecer incentivos a los policías que logren detener delincuentes, una medida que busca combatir la creciente inseguridad en la ciudad.
Intercambio de acusaciones en redes sociales
La red social X (anteriormente conocida como Twitter) se convirtió en el escenario de un intenso cruce de palabras entre ambos funcionarios. Pinedo, sin mencionar directamente a Martínez, lo calificó de “corrupto mandadero”, sugiriendo que sigue las instrucciones del líder de su movimiento político, Carlos Caicedo. En su mensaje, el alcalde expresó: “En su caída en picada se agarra de lo que sea para permanecer vigente. Mejor póngase a trabajar, páguele a Dávila y deje de ser sapo”.
Esta respuesta fue provocada por una crítica que Martínez había hecho un día antes sobre la propuesta de Pinedo. El gobernador cuestionó la idea de ofrecer estímulos a los policías, argumentando que podría llevar a abusos y desvíos de fondos públicos. Martínez comentó: “¿Resulta que nuestros impuestos por cuenta de esto terminarán financiando “limpiezas sociales” y hasta terminen inclinando la balanza hacia alguno de los dos bandos que se disputa el control del micro, al igual que la salida de la droga de la ciudad en la guerra que libran el Clan del Golfo y Los Pachencas?”.
Contexto de la propuesta de incentivos
La propuesta de Carlos Pinedo consiste en crear un fondo de cerca de mil millones de pesos destinado a recompensar a los policías que logren reducir los índices de criminalidad con acciones efectivas. Esta medida busca motivar a las fuerzas de seguridad en medio de una oleada de inseguridad que afecta a la región. Sin embargo, las críticas de Martínez resaltan el temor de que estos incentivos puedan ser mal utilizados o generar más conflictos dentro de las fuerzas policiales y los grupos criminales.
La tensión entre Pinedo y Martínez refleja un clima político polarizado, donde las acusaciones y las diferencias en políticas públicas se ventilan públicamente, muchas veces con ataques personales. La referencia de Pinedo a “pagarle a los Dávila” alude a una deuda que el gobernador adquirió con un miembro del grupo empresarial Dávila, lo cual ha sido un tema de controversia y críticas hacia la administración de Martínez.
