El posible nombramiento de Carlos Caicedo como Superintendente de Servicios Públicos ha desatado una tormenta de críticas por su polémico pasado administrativo. Acusaciones de malos manejos, procesos judiciales y vínculos cuestionables han puesto en duda su capacidad para liderar una entidad clave en el país.
El nombre del exgobernador del Magdalena, Carlos Caicedo, ha ganado fuerza en los últimos días como posible candidato para asumir la Superintendencia de Servicios Públicos, tras la renuncia de Dagoberto Quiroga. Sin embargo, su posible designación ha desatado una ola de críticas y controversias debido a su historial de gestión en entidades clave de Santa Marta.
Caicedo, quien fue responsable de la creación de la Empresa de Servicios Públicos de Santa Marta (Essmar) tras la salida de Metroagua, ha sido señalado por haber dejado ambas entidades en crisis. Metroagua, que había operado sin problemas financieros durante años, fue reemplazada por Essmar bajo el mando de Caicedo. Sin embargo, Essmar terminó siendo intervenida por el gobierno nacional debido a supuestos malos manejos financieros y administrativos. Según diversas fuentes, la intervención se originó por la falta de proyectos de mejora en los servicios de acueducto y alcantarillado de la ciudad, los cuales siguen siendo deficientes.
Además, se le acusa de haber quebrado a la ESE Distrital de Santa Marta, que también fue intervenida por el gobierno central. Estas intervenciones han sido vistas como resultado de una gestión ineficiente, marcada por problemas financieros y operativos que no lograron resolver las necesidades de los ciudadanos. Según estimaciones, el impacto financiero de estos fallos podría alcanzar los 300 mil millones de pesos, sumando las pérdidas por corrupción y mal manejo de recursos en diferentes proyectos.
A las críticas por su gestión, se suman los más de 50 procesos judiciales y disciplinarios que enfrenta Caicedo, muchos de los cuales están avanzados en etapas de juicio, con imputación de cargos y solicitud de medidas de aseguramiento. Entre estos casos, destacan procesos calificados como gravísimos por la Procuraduría General de la Nación (PGN), lo que ha generado serias dudas sobre su idoneidad para asumir un cargo tan importante como el de Superintendente de Servicios Públicos.
En el ámbito político, las acusaciones también señalan que el grupo político de Caicedo habría recibido apoyo de grupos de autodefensas de la Sierra Nevada para las elecciones de 2019. Estos señalamientos, realizados en múltiples ocasiones, han sido vinculados a una supuesta impunidad que rodea al exgobernador, algo que genera desconfianza entre la ciudadanía.
Ante estas circunstancias, sectores críticos del gobierno han expresado que la posible designación de Carlos Caicedo no sería una garantía de confianza para liderar una entidad tan relevante como la Superintendencia de Servicios Públicos. El debate continúa, mientras el país espera la confirmación oficial de su nombramiento.
