Redacción: Anii Segrera
Una reciente publicación en la red social X (anteriormente conocida como Twitter) realizada por Gustavo Bolívar, director de Prosperidad Social, ha desatado una oleada de críticas y controversias. En su mensaje, Bolívar anunció que está buscando ‘influencers’ para ayudar a difundir los logros del gobierno de Gustavo Petro, contrarrestar lo que él denomina “calumnias de la oposición” y corregir la supuesta tergiversación de ciertos sectores de la prensa. Este anuncio ha sido interpretado por muchos como un intento de reforzar la imagen del Gobierno del Cambio a través de las redes sociales, en un contexto de creciente polarización política.
Bolívar explicó que la estrategia incluye no solo la defensa del gobierno, sino también la difusión de convocatorias para apoyar a las poblaciones más vulnerables del país. Sin embargo, la propuesta ha sido vista por algunos críticos como una forma de propaganda política, especialmente en un momento en que el gobierno de Petro enfrenta cuestionamientos sobre el cumplimiento de sus promesas de campaña. Para muchos, esta iniciativa refleja la preocupación del gobierno por mejorar su imagen pública en medio de las críticas que ha recibido en sus dos años de mandato.
Ante los ataques y críticas que ha recibido por su publicación, Bolívar respondió con firmeza, argumentando que los detractores de su propuesta se sienten incómodos porque estos ‘influencers’ podrían desmentir lo que considera calumnias y exponer prácticas corruptas en el país. La controversia pone de relieve la importancia de las redes sociales en la política contemporánea y cómo estas plataformas se han convertido en un campo de batalla clave para la comunicación y la influencia en la opinión pública.
