Estudiantes de la Institución Educativa Distrital San Fernando sede 3 están en peligro debido a la contaminación de aguas servidas en la alberca de agua potable. La comunidad exige soluciones urgentes a la Secretaría de Educación y a las autoridades de control para salvaguardar la salud de los niños.
En el barrio San Jorge de Santa Marta, la Institución Educativa Distrital San Fernando sede 3 vive momentos de angustia. La presencia de aguas servidas en la alberca que abastece de agua potable a la escuela ha puesto en jaque la salud de más de 400 estudiantes, quienes dependen de esta agua para su consumo, preparación de alimentos y aseo. La problemática fue expuesta por Wadid Agudelo, líder social de San Jorge, quien ha manifestado la profunda preocupación que embarga a la comunidad.
“La contaminación comenzó en abril de este año. La empresa de servicios públicos Essmar realizó una revisión, pero determinó que el problema era de la misma alberca, sin embargo, a pesar de que el rector ordenó su reparación, la contaminación persiste”, expresó Agudelo con evidente molestia. Esta situación no solo afecta a los estudiantes, sino que también amenaza la salud de los habitantes del sector, que han reportado síntomas de enfermedades gastrointestinales y dermatológicas debido al contacto con el agua contaminada
La situación en la escuela se agrava aún más debido a la falta de seguridad. Según Agudelo, la ausencia de un celador los sábados ha permitido que delincuentes ingresen al plantel para robar, dejando a la comunidad y a los estudiantes en un estado de vulnerabilidad. “La institución se ha convertido en un blanco fácil para los ladrones, y esto solo aumenta la inseguridad en la zona”, señaló.
