Por: Lina María Peña
El hemisferio sur se juega en los próximos meses la posibilidad de entregarse al neocomunismo o seguir en un proceso de crecimiento de capitales para el desarrollo económico de la región.
En Chile se presenta una coyuntura política similar a la colombiana, en donde los presidentes Sebastián Piñera e Iván Duque tienen índices altos de desaprobación social y ello ha permitido que el discurso populista redimido por la extrema izquierda cale entre la gente del común. Otro aspecto de iguales condiciones entre estos países es que ambos presidentes tienen sus candidatos oficiales, para el caso chileno es el señor Sichel y para el caso colombiano el candidato Zuluaga.
En el escenario electoral, los candidatos oficialistas son barridos en las encuestas que realizan las diferentes firmas avaladas por los organismos electorales y los candidatos de la izquierda obtienen los consabidos réditos políticos. Es decir, que la izquierda aprovecha la desconexión política de los gobiernos con la gente.
EL FENÓMENO POLÍTICO QUE IMPONEN LAS BASES SOCIALES
Los hechos políticos recientes han permitido que nazcan candidaturas que a pesar de tener arraigo en los partidos tradicionales, las mismas han sido consideradas como las del sentir ciudadano, las que representan una nueva forma de hacer política orientada al querer de las bases sociales.
En Chile, surgió la candidatura casi muerta del señor José Antonio Kast, al que desechó el oficialismo del gobierno de Piñera pero que curiosamente su ascenso es considerado como un fenómeno político electoral. Hace apenas 4 meses su aceptación era del 4 por ciento, no obstante para el mes de septiembre alcanzaba el 12 por ciento, un mes después se ubicaba en el 17 por ciento y hoy por hoy es el candidato que arrasaría en la primera vuelta presidencial y sería ganador en cualquier escenario que se presente en una eventual segunda vuelta.
En Colombia, parece que lo que ocurre en Chile es una imagen calcada para la candidata presidencial María Fernanda Cabal. El oficialismo a través de los congresistas y senadores del centro democrático firmaron una carta en apoyo al candidato del presidente Iván Duque, sin embargo hoy el partido pasa por una crisis en la que las bases del uribismo le reclaman de forma vehemente que no permitirán la imposición de un candidato presidencial que no reúna las calidades y recoja los principios de la derecha colombiana.
Las encuestas que se empezaron a realizar por parte de diferentes sectores políticos, indicaban un leve ascenso en el marcador electoral en favor de María Fernanda Cabal, situación que preocupó a aquellos que se creían imbatibles.
En la actualidad, las encuestas tienen un marca registrada denominada el fenómeno político María Fernanda Cabal y las cosas tomaron un tinte político donde no es el presidente Duque ni el partido centro democrático los gestores del ascenso de la Cabal, sino por el contrario es el fervor popular del uribismo es el que ha posicionado esta candidatura.
¿A QUÉ SE DEBE LA ACEPTACIÓN DE ESTOS POLÍTICOS DE DERECHA?
Todo parece indicar que tanto los candidatos María Fernanda Cabal y José Antonio Kast, recogen los frutos de sus discursos vehementes en contra del comunismo, la miseria, el terrorismo y la dictadura que representa la extrema izquierda, pero además su firmeza frente al desarrollo del libre comercio, las condiciones para la inversión privada, la generación de empleo y la seguridad democrática, tienen un impacto social en la gente y eso los lleva tomar un distanciamiento con sus gobiernos pero los acerca al pueblo.
La elección en Chile puede marcar una tendencia en Colombia, sin embargo todo dependería de la lectura política que hagan los distintos partidos para evitar que el foro de Puebla Oriente y regente su poderío de extrema izquierda en la región.
