La Fundación Reinas con un Propósito benefició a 50 niños de Altos de Villa Concha con almuerzos y clases de etiqueta, promoviendo su desarrollo social y valores.
Este fin de semana, la Fundación Reinas con un Propósito llevó a cabo una destacada actividad en Altos de Bahía Concha, beneficiando a 50 niños y niñas de la comunidad en situación de vulnerabilidad. A través de un almuerzo especial y clases de etiqueta y protocolo, la fundación continúa su misión de empoderar a las nuevas generaciones, preparándolas para los desafíos de la vida cotidiana y el ámbito social.
Los menores no solo disfrutaron de una comida nutritiva, sino que también recibieron formación en comportamiento social. Las lecciones de etiqueta y protocolo impartidas por la instructora Elga López les enseñaron desde cómo desenvolverse en la mesa hasta cómo enfrentar con seguridad situaciones sociales importantes. Esta labor refuerza el objetivo central de la fundación: educar en valores y habilidades a jóvenes que, de otro modo, no tendrían acceso a este tipo de formación.
Desde su creación hace más de cuatro años, la Fundación Reinas con un Propósito ha trabajado incansablemente en pro de la comunidad samaria. Bajo la dirección de Johanna Bernier y en colaboración con la Casa de Reinas en Santa Marta, la fundación ha extendido su alcance a diversos barrios de la ciudad. Su objetivo es llevar educación en etiqueta, glamour y pasarela a los jóvenes de sectores en situación de vulnerabilidad, brindándoles oportunidades de desarrollo personal y profesional.
El apoyo de diversas empresas locales ha sido fundamental para el éxito de estas actividades. Gracias a su colaboración, la fundación puede seguir llevando a cabo este tipo de iniciativas que no solo alimentan, sino que también forman a los líderes del futuro. La actividad continuará durante todo el mes de agosto, con el barrio Galán como el próximo destino de esta inspiradora iniciativa.
