Redacción: Elartículo.co
El exalcalde de Santa Marta Rafael Martínez, quién volvió a su habitual puesto de secretario designado por su referente Carlos Caicedo, se le vio muy agitado por lo que considera una mala gestión de la empresa Aguas del Magdalena en las obras que desarrollo en los distintos municipios del departamento.
De manera airada reclamó al gerente Ricardo Torres que pese a que haya construido las redes de acueducto y alcantarillado las mismas no conducen agua, ello luego de que el propio gerente manifestara que la operación de los acueductos son responsabilidad de las Alcaldías Municipales.
Al exalcalde Rafael Martínez le queda complicado servir de referente moral para reclamar el agua para los magdalenenses, toda vez que fue él mismo el que profundizó la peor crisis del agua en toda la historia de Santa Marta, no hubo una sola mejoría en el servicio luego que se terminara el contrato con la extinta Metroagua. La panacea que le vendieron a los samarios fue la empresa Essmar, una entidad que sin tener la capacidad instalada empezó a trabajar con Veolia y los problemas fueron ahondando en desmedro de las comunidades. La Essmar según denuncias de varios líderes, se convirtió en la joya de la corona del movimiento fuerza ciudadana, en razón al botín burocrático y económico que representaba para los escenarios electorales. La exgerente Ingris Aguirre adquirió una relevancia importante en las campañas Caicedistas y su creciente opulencia es notoria en la ciudad de Santa Marta, mientras los samarios hoy continúan con sed, con motobombas en las madrugadas y haciendo de topos para conseguir el preciado líquido.
Rafael Martínez, quedó en la historia de los samarios como el administrador que generó la mayor cantidad para construcción de pozos de agua que poco o nada han mitigado la problemática pero a la vez convirtió el agua en un verdadero negocio particular en donde el presunto “cartel de carrotanques” viene llenando los bolsillos de personas afines a sus causas políticas.
Lo más risible de Martínez, es que su progenitor político fue sancionado por parte de la procuraduría en primera instancia luego de la denuncia que hiciera el excandidato a la Alcaldía Aristides Herrera, quién con pruebas y documentos en mano, demostró como era el accionar del “cartel de los pozos de agua” en donde las presuntas coimas y presuntos pagos de sobornos, fueron las verdaderas razones para generar un negocio que no benefició a los samarios.
La Essmar en su poco tiempo de creación y manejada por el gobierno de Rafael Martínez quedó al punto de ser intervenida por parte de la superintendencia de servicios públicos y aún está en vilo por parte de éste ente de vigilancia esa actuación administrativa.
