La familia solicitó la práctica de una necropsia para establecer si fue envenenado por el consumo de alimentos en la estación La Norte. El cuerpo será velado en la funeraria Jardines de Paz.
En la Unidad de Cuidados Intensivos de la clínica La Milagrosa, permaneció el empresario Allan Scalzo, recibiendo atención especializada, quien pese al esfuerzo de los médicos, no resistió el delicado tratamiento en que fue sometido por las células bacterianas que invadieron sus pulmones.
Al momento de ser remitido al centro médico, los facultativos advirtieron del delicado estado de salud que presentaba el paciente, por lo que cuestionaron el tardío ingreso a la clínica, donde afirmaron que las posibilidades de seguir viviendo eran mínimas.
“Mi permanencia en la instalaciones de La Norte, ha causado en mi estado de salud un severo cuadro gripal que se manifiesta a través de elevada temperatura corporal, problemas para respirar y cefaleas”, afirmó en su momento Allan Scalzo, en la queja elevada ante la Procuraduría.
A pesar de esta solicitud, tanto la Fiscalía como el Juzgado Primero Penal Municipal negaron el trasladado a un centro médico y tampoco autorizaron el acceso de un médico privado particular para atender al procesado en sitio de reclusión.
Los mecanismos jurídicos interpuesto por Alex Fernández Harding, abogado del empresario implicado en el homicidio de Haled Saghair, sirvieron para que Scalzo, pudiera recibir una adecuada atención médica, ya que su estado de salud se desmejoró cuando fue privado de la libertad en la estación La Norte de esta ciudad.
El profesional del derecho, expuso con argumentos ante la Fiscalía, el plan que se orquestó para asesinar a su apoderado y el pago de soborno a falsos testigos para culpar a su apoderado.
“La Fiscalía no brindó las garantías judiciales a mi apoderado porque siempre quiso hacer un show mediático o protagonismo contra la dignidad de una persona que siempre asistió de manera voluntaria al estrado judicial. Muy extraño que después de 5 años hagan esta acusación y tenemos evidencias del plan que se fraguó para humillarlo y asesinarlo”, expresó el jurista.
Con los testimonios de Fausto Albeiro Mora, quien denunció el ofrecimiento que le hicieron para culpar a Scalzo, y con las evidencias del posible envenenamiento en prisión, el abogado Alex Fernández, continuará su batalla jurídica contra la Policía, Fiscalía, Alcaldía y Juzgado al no brindarle protección y violar sus derechos fundamentales a la dignidad humana.
